Y llegó Feuillade

Ojeo un catálogo de fotografías del cine mudo francés. Antes de llegar al cine de la modernidad, con Marcel L’Herbier, debe ser Louis Feuillade el que acabe con una larga serie de imágenes en las que lo que predominaba era un grupo de gente tirando a numeroso, mal disfrazado, gesticulante o sin saber qué hacer, ocupando todo el cuadro, ya sea en exterior o en un decorado que también ahoga bastante.

Las imágenes que cuelgo son de “L’escapade de Filoche” y de “L’expiation”, de 1915, que creo no haber visto nunca. He estado a punto de poner otra de “Judex” -1916- con una profundidad de campo enorme, a base de puertas sucesivas enmarcando un personaje, pero estas dos también destacan, en cualquier caso, por cómo incitan mediante diferentes estratagemas a mirar a un punto determinado del cuadro, a seguir interesado la narración, a respirar.