sábado, 31 de enero de 2015

Godard y la indefinición

Preparando un ya muy próximo seminario de cine, doy en una entrevista de Godard sobre “Pierrot le fou” con esta cita, muestra de esa habilidad que tiene para desconcertar, cuando le preguntan sobre sus films, hablando de cualquier otra cosa que le preocupe en ese momento:
- Velázquez, al final de su vida, ya no pintaba cosas definidas, pintaba lo que había entre las cosas definidas y eso lo repite Belmondo cuando imita a Simon: no habría que describir a la gente, sino lo que hay entre la gente.
Constatando un defecto habitual de los escritos sobre cine –la copia descarada-, esa frase, escrita de diversas formas más o menos aproximadas, veo que aparece en varias críticas sobre la película de Godard, sacando de la misma deducciones de lo más diverso.
En el muy pormenorizado y útil manual que escribió Romà Gubern para “Cuadernos Ínfimos” (“Godard Polémico”, Tusquets 1969) se recuerda que la frase, algo diferente, aparece en la “Historia del Arte” de Élie Faure que está leyendo en voz alta Ferdinand (Pierrot) en la bañera, al principio del film:
- Velázquez, después de los cincuenta años, no pintaba ya las cosas definidas. Erraba en torno a los objetos con el aire y el crepúsculo (…)
Yo diría que se trata, como muchas de las cosas de Godard, de la apropiación de una idea conceptualmente muy atractiva, pero que todos, y el mismo Godard el primero, han hecho rodar para acercarla a sus (a veces escasas) ideas explicativas sobre su cine. Y que más que lo que parece entenderse (esa rica deriva hacia un arte abstracto en los intersticios entre los modelos principales de los cuadros) se trataría de un cierto avance del impresionismo en los retratos, acercándose a la sugerencia del esbozo, mucho más preciso en muchas ocasiones que el propio retrato hiperrealista.
En la imagen, “Mercurio y Argos”, una de las últimas pinturas de Velázquez.

Pasolini poeta


Seré sincero. Yo iba a ir el jueves por solidaridad con los compañeros de Projecte Pasolini Barcelona que habían organizado el acto. No sé italiano (aunque será en castellano, supongo que se evocará la poesía de Pasolini en italiano), ni practico demasiado la poesía, y me temía que, con ese nombre (“Pasolini poeta”), se trataría de un cansino acto académico más de los que tanto se dan.
Pero resulta que, por una curiosa casualidad, he tenido la ocasión de ver una auténtica performance de Raffaele Pinto, dando clase ante sus alumnos, conversando, explicándose, y he descubierto que se trata de un auténtico fenómeno de la naturaleza, que nadie a quien aprecie debería dejar de ver.
Después de recomendarlo encomiásticamente, que se dice, sólo me vence la curiosidad al pensar cómo hará en su charla este profesor tan grandilocuente pero tan extremadamente claro, que trasmite de forma tan expresiva y nerviosa su pasión, para ligar a Pasolini con Dante, su especialidad. Atentos, pues.
(La fotografía de Raffaele Pinto corresponde a una imagen de un programa de L’hora del Lector, al que acudió para hablar de la “Senilità” de Svevo… y acabó mencionando que podía ser considerada como una nueva lectura de “La vita nuova” de Dante…)



 

martes, 27 de enero de 2015

Diálogos


El domingo pude ver en p’tit comité lo que desde luego será una muy agradable sorpresa –por insospechada- de película, aunque se hará aún esperar un tiempo. El caso es que su arranque y su final –esplendorosos- me recordaron lo mucho disfrutado con Rohmer.
¿Qué sería de una sesión dedicada a “Diálogos” en un seminario sobre lenguaje de cine sin analizar en ella una secuencia de Rohmer? En la primera sesión del nuevo ciclo de “Ombres Mestres. Les lliçons dels grans del cinema” pasamos y analizamos, entre otras, una secuencia de “La coleccionista”, aunque podríamos haber escogido otras muchas suyas.
Bueno: no se deben hacer este tipo de preguntas descalificadoras, porque igual que Rohmer podríamos decir otros cuantos nombres, y se hace imposible pasar y hablar de cosas de todos ellos en un par de horas.
Todo esto viene a cuento porque he preguntado que cuánta gente se había apuntado en el seminario que daremos en febrero (dedicado a “Diálogos”, “Vanguardias” y “Bailes”), y me han dicho que por el momento no llegamos ni al 10% necesario para cubrir gastos. Y acudo a esto del FB para anunciar la cosa, con las disculpas por importunar por delante…
El enlace con los detalles (clicar en una de las tres sesiones de "Ombres Mestres", en martes 10, 17 o 24 de febrero):


 

viernes, 23 de enero de 2015

La "gala" del Projecte Pasolini Barcelona

 La Casa Degli Italiani en Barcelona celebraba esta semana sus 150 años de vida. Me han comentado que tuvo históricamente, desde su inicio, un empuje e importancia muy grandes. Ligando un poco cabos, he llegado a la conclusión de que su empuje debió tener mucho que ver con la ebullición de la industria en Barcelona y Catalunya entera durante la última parte del s. XIX: Hasta hace bien poco, la mayor parte de la maquinaria de precisión de las fábricas medias catalanas solía ser italiana y eso debía suponer, sin duda, un gran flujo de sus técnicos y comerciantes hacia la ciudad. Pero eso ya entraría dentro de una buena investigación sobre las instituciones extranjeras en la ciudad, que deberían estar reclamando a voz en grito su historificación, una buena exposición demostrativa, etc.

Para celebrar el aniversario han forrado las paredes de su sala con toda una serie de fotografías de los acontecimientos de todas sus fases históricas, sin olvidar ninguna, y de esta guisa es como nos ha acogido al grupo Projecte Pasolini Barcelona esta tarde de jueves, ya que gracias a la intervención de Roberta Ferraza, directora del Instituto Italiano di Cultura, hemos podido celebrar ahí el acto en que presentábamos las diferentes actividades programadas para este año Pasolini. Teniendo yo un pie dentro y otro fuera de la sesión, me atrevería a decir que ha sido ese un acto largo (casi dos horas), con un par de puntos –a mi entender- fuertes, otros seguramente más cansinos y un par de golosinas puestas ahí para desintoxicar y, a la vez, abrir boca a los espectadores, dejándoles entrever lo que podrán degustar próximamente. Por las fotos del álbum (todas demasiado iguales y de poca calidad, porque las he sacado casi todas ellas desde mi cómoda pero inmóvil butaca, con poca luz y sin medios sofisticados) voy comentando alguna que otra cosa de la sesión, que ha acabado a las tantas, en un restaurante vecino, con camarero dicharachero de Jaén.

El edificio de la Casa Degli Italiani, en el Passatge Méndez Vigo, de Barcelona.

El director de escena, Pere Alberó, adecuando, con escoba y recogedor, el escenario.

El realizador que había de dejar constancia del acto, Hilari Pellicé, preparando su instalación.

Stefano Puddu y Nuria Solbes dándose ánimos: Fueron escogidos por unanimidad del grupo como presentadores del acto. Detrás se distingue un poco a Pablo Borsato, el técnico de la Casa degli Italiani, artífice de que todo eso no se nos haya desintegrado por el lado más inoportuno.

Celeste Araujo, empachada de Ibuprufeno, tose para ver si se despeja la voz y la cabeza. Habrá de leer un texto sobre la actualidad de Pasolini que ha escrito Josep Torrell, quien, asustado, se descubre reconocido por el repórter Tribulete.

Víctor Bocanegra con su teclado, donde ha interpretado una hermosa canción que ha compuesto sobre un poema de Verdaguer e interpretado suavemente.

Nuria y Stefano dando continuidad al acto.

Neus Mayolas pescada por el insolente paparazzi en el improvisado camerino mientras efectuaba unos ejercicios de preparación.

Roberta Ferrazza, directora del Instituto Italiano di Cultura, improvisa un corto pero me ha parecido que sentido discurso sobre Pasolini y su utilización por parte del PPB.

Nuria, que ha demostrado unas señoras tablas (nada de tablitas), hablando pausadamente, dejándose entender.

Celeste Araújo, con la voz muy tocada por las bacetrias y los antibióticos, lee finalmente el texto de Josep Torrell.

Xavier Perarnau iba a decir cómo nació todo esto, y qué se hizo ya el año pasado, aunque más bien ha hecho una filípica moral, con llamada a la participación incluida.

Sandra Sferragatta ha leído un par de textos en friuliano, dejando claro uno de los temas de conversación para la cena. Porque somos unos ignorantes absolutos en lo que respecta al mapa idiomático italiano.

La foto corresponde a uno de esos momentos de fuerza de que hablaba. La fuerza que ha desprendido Dolors Miquel recitando un par de poemas. Luego me han comentado que, acabado el acto, iba a coger un tren y desplazarse bastante lejos, hacia su casa. ¡Chapeau ante su generosa dedicación! (y su fuerza, claro)

Iván Sánchez-Morales, con ayuda, porque también tenía la voz tocada, ha explicado brevemente el proyecto pedagógico ligado a Pasolini.

A la sala ha venido gente muy diversa, con unos cuantos nombres de peso. Yo he quedado contento de ver a unos cuantos amigos de Facebook, incluso corporeizando alguno de ellos a los que no había visto nunca personalmente...

Para mí éste ha sido otro de los momentos de fuerza de la sesión. Ella es Neus Mayolas, una discípula de Ricard Salvat que me ha dejado admirado por su forma de decir y de estar durante el fragmento de la obra "Pasolini Corsario", que ha interpretado.

Más Neus Mayolas.

Al final no ha podido llegar el actor de la obra, y ha sido su autor y director, Pere Alberó, quien le ha sustituido. Con juego escénico ampliado, entrando en el escenario desde el fondo de la sala, incluido.

Aproximándose a su actriz. Pero en ese momento no es el autor y director de la obra (basada en el Pasolini Corsario), sino su actor.

Entre las conferencias y mesas redondas (que han presentado Núria y Stefano) hemos hecho bastante hincapié en nuestra predilección por los diálogos, las confrontaciones. Pues bien. Poco íbamos a saber que en el fragmento de obra que hemos presenciado iba incluido uno como éste.

Con esta evolución.

Y, acabo, Stefano y Nuria cierran el acto, y llaman a la colaboración de la gente para poder hacer realidad todo el programa que se ha presentado, que no está mal.

Risas en el postre de la cena. Igual cuelgo alguna foto más, pero me han salido bastante mal. Quizás mejor enviarlas en petit comité. Perdón por el rollo...


miércoles, 21 de enero de 2015

Un any sota el signe de la passió


Será ya mañana jueves por la tarde. Habrá un poco de teatro, cine, poesía, música, lectura de un texto que nos dirá por qué hoy Pasolini… y procuraremos despertar el interés por asistir a alguno de los muchos actos planteados para este año Pasolini. No se cobra nada en la entrada, y si al final somos bastantes, no hará frío. Una buena ocasión para acercarse a curiosear por la Casa Degli Italiani, en el Passatge Mendez Vigo, justo enfrente del Instituto Italiano di Cultura de Barcelona.

 

Un año Pasolini


Será ya mañana jueves por la tarde. Habrá un poco de teatro, cine, poesía, música, lectura de un texto que nos dirá por qué hoy Pasolini… y procuraremos despertar el interés por asistir a alguno de los muchos actos planteados para este año Pasolini. No se cobra nada en la entrada, y si al final somos bastantes, no hará frío. Una buena ocasión para acercarse a curiosear por la Casa Degli Italiani, en el Passatge Mendez Vigo, justo enfrente del Instituto Italiano di Cultura de Barcelona.

 

lunes, 19 de enero de 2015

Umberto D


Hay veces en que la ciudad, en vez de irse haciendo, se va deshaciendo con el tiempo. Ese sería el caso de este trozo de ciudad romano, con este gran edificio al menos en la ficción de “Umberto D” (Vittorio De Sica, 1952) dotado de la marquesina de un cine, y limitado por una arbolada plaza, que parece hoy haber desaparecido casi totalmente.
Es otra de las comparaciones entre una foto sobre la situación actual de un espacio urbano romano y un fotograma de las que propone “Roma, si gira!” (Mauro d’Avino y Lorenzo Rumori, Gremese, Roma 2014).

Un any sota el signe de la passió


El jueves 22, a las 19h. Hemos intentado que se alejase lo más posible de un acto protocolario de presentación de las actividades del año. Habrá un poco de teatro, recital de poesía, música, proyección de cine,...que, por sí solos, creemos que ya tienen los suficientes atractivos. Entre tanta cosa, muy raro será que no haya algo cercano a los intereses de cada uno. 

Un any sota el signe de la passió



El jueves 22, a las 19h. Hemos intentado que se alejase lo más posible de un acto protocolario de presentación de las actividades del año. Habrá un poco de teatro, recital de poesía, música, proyección de cine,...que, por sí solos, creemos que ya tienen los suficientes atractivos. Entre tanta cosa, muy raro será que no haya algo cercano a los intereses de cada uno.

jueves, 15 de enero de 2015

Adiós al cine Alexandra

Hay visiones que tienen un efecto más que devastador. Esta tarde, en la Rambla de Catalunya.

Roma, si gira!

La ruina de la guerra (“Roma città aperta”, Roberto Rossellini 1945), la recuperación a finales de los 50 (“Il Ferroviere”, Pietro Germi 1956) y el nuevo destrozo posterior, con la instalación de la "tangenciale".
Otra página de “Roma, si gira! Gli scorci ritrovati del cinema di ieri”, Gremese, Roma 2012)





miércoles, 14 de enero de 2015

¡A un dólar, a un dólar!


Arrancó esta tarde el Miradocs (BEC/Casa Elizalde), y lo hizo bien, proyectando “¡A un dólar!, ¡A un dólar!” (María Aguilera, 2013), con la presencia de la realizadora.
Empieza con las declaraciones de vendedores callejeros explicando cómo les expulsan sin miramientos de la plaza y calles del centro histórico de Quito (se deben estar acabando esos extraordinarios filósofos callejeros que José Luis Guerin descubría por las plazas latinoamericanas en su “Guest”), luego muestra el proceso de desalojo previo de los ambulantes, que colapsaban con sus instalaciones todo el centro, y su concentración en diversos centros comerciales, confrontando declaraciones oficiales con las de los sufridores del proceso. Y, cerca ya del final, da un sorprendente salto a Barcelona, el “modelo” de la cual, y hasta las empresas que han trabajado en el establecimiento de eso que llaman la “marca Barcelona”, parecen estar extendiéndose por muchas ciudades latinoamericanas.
Aporta datos escalofriantes el documental, que puede ser un instrumento muy valioso para desencadenar debates, cuestionar lugares comunes y, en definitiva, hacer reaccionar ante una marea que parece imparable corroyendo todos los centros históricos: El de Quito ha perdido durante los 15 años de supuesta “limpieza” (que ha dejado ciertamente sus edificios -Patrimonio de la Humanidad según la UNESCO- evidenciando su belleza), hasta un 45% de su población, que no ha podido seguir el ritmo económico a que ha conducido la revalorización inmobiliaria en todo el proceso. María Aguilera ha hecho un comentario sumamente interesante: Mucha población del centro histórico de Quito vio con buenos ojos la desaparición de toda esa retahíla de puestos que apenas dejaba pasar por las calles, que las hacía hasta peligrosas, pero ahora son quizás mucho más peligrosas que antes, porque llegada una cierta hora quedan absolutamente desiertas.
Sale en tres ocasiones, comentando ese repetido proceso, Manuel Delgado, que me ha parecido especialmente atinado. En una de esas ocasiones se pregunta si hasta los discordantes como él mismo no habrán entrado ya a formar parte de ese enorme decorado, de esa postal turística que ha sustituido a los antes con vida centros de la ciudad.
(A falta de fotogramas de la película, la foto de la plaza de Quito la he sacado de la página andes.info.ec, que no especifica quién es su autor)

viernes, 9 de enero de 2015

Pigneto




Y la terraza del bar donde Accatone y sus amigos dejan pasar el tiempo -sin beber nada, pero mofándose de todos los que pasan por ahí-, o sólo existió para el rodaje o bien se ha convertido ahora en una pulcra casita del barrio del Pigneto romano.
Otra de las deducciones fácilmente obtenibles de la contemplación del libro “Roma, si gira” de Mauro D’Avino y Lorenzo Rumori (Gremese, 2014)

Lugar de rodaje de Accattone

Y la terraza del bar donde Accatone y sus amigos dejan pasar el tiempo -sin beber nada, pero mofándose de todos los que pasan por ahí-, o sólo existió para el rodaje o bien se ha convertido ahora en una pulcra casita del barrio del Pigneto romano.
Otra de las deducciones fácilmente obtenibles de la contemplación del libro “Roma, si gira” de Mauro D’Avino y Lorenzo Rumori (Gremese, 2014)


Pigneto

Milagrosamente, el aspecto de la carretera de uno de los travellings de “Accattone” (Pier Paolo Pasolini, 1961) se ha conservado casi intacto, tan sólo con alguna que otra valla más. Es una de las deducciones fácilmente obtenibles de la contemplación del libro “Roma, si gira” de Mauro D’Avino y Lorenzo Rumori (Gremese, 2014)

miércoles, 7 de enero de 2015

Jauja


Estaba, a última hora de esta tarde, viendo cómo unos cuantos se habían extraviado en busca de Jauja por una inmensa tierra más que inhóspita y, al tiempo, no pudiendo olvidar lo de hoy en París, visualizaba de tanto en tanto, por esos paisajes de la Patagonia, cruzándose con los personajes del film, quizás en vez de a los Cabezas de Coco, a otros negros personajes, también en una estéril búsqueda de no se sabe muy bien qué tipo de Jauja.
El giro final del film (“Jauja”, Lisandro Alonso, 2014), con sus piezas que encajan para no encajar globalmente de ninguna forma, sumado a esas otras imágenes recurrentes, darán inevitablemente varias vueltas por la cabeza, como las imágenes que vienen y vuelven repetidamente en los penosos estados de vigilia, sin solución. Sólo queda levantarse, olvidándose del sueño por completo.

martes, 6 de enero de 2015

Llibres - 134: Roma si gira

Llibres – 134
Escogí comprar sólo este primer volumen y ahora, una vez revisado, lamento no haberme hecho también con el segundo, dedicado a los años 70 y 80. Forman parte de una serie en la que los mismos autores han dedicado libros a Milán, Venecia o Nápoles. Todos hablan de la evolución de la ciudad partiendo de las imágenes de películas rodadas en exteriores.
Lo lógico sería que esto estuviera la mar de bien documentado en alguna página web, pero algún intento que he conocido presenta unos resultados más bien tristes, con lo que hay que acudir a libros como éste.
Pondré alguna fotografía por aquí, para dar a entender cómo funciona…
Mauro d’Avino y Lorenzo Rumori. “Roma, si gira! Gli scorci ritrovati del cinema di ieri. Anni ’40 ’50 ‘60”. Gremese, Roma 2012. Segunda reimpresión en 2014.


sábado, 3 de enero de 2015

The imitation game


Ya que he repetido que no quiero dedicarme a escribir sobre películas que me han desesperado, hablaré sólo de una escena de “The imitiation game” (Morten Tyldum, 2014), a la que me han arrastrado esta tarde y que he comprobado que ha resucitado en el Verdi el fenómeno de las colas y de la sala grande llena:
En ella, el protagonista, sabio incomprendido y aislado frente a su apuesta / deber, sale a correr por el campo, supongo que rememorando los paseos de concienciación del Tom Courtenay de “La soledad del corredor de fondo (Tony Richardson, 1962). No hay que asustarse. La impresión dura poco. En seguida no sé si el realizador o alguien de la producción tiene la brillante idea de rematar la jugada, y dirige la cámara hacia unas nubes que aún se distinguen gracias a la lejana puesta del sol, dejando una imagen muy bonita, como para hacerse algo en los pantalones.

jueves, 1 de enero de 2015

La Nueve ou les oubliés de la victoire


Una foto dejaba ver el nombre del blindado de los que liberaron la alcaldía de París en agosto del 1944: “Guadalajara”. Pese a ello, nada en la prensa francesa, durante mucho tiempo, dio a entender que hubiese sido una columna integrada en su inmensa mayoría por republicanos españoles la protagonista del hecho.
En 2010, un documental francés hecho para la televisión (“La Nueve ou les oubliés de la victoire”, Alberto Marquardt) reseguía el penoso itinerario de los dos únicos supervivientes españoles de la División Leclerc, un asturiano –residente en una residencia francesa- y un catalán. Vale la pena verlo y divulgarlo, para combatir tanto silencio.
La foto corresponde a miembros de la 9ª Compañía de la División de Leclerc, durante su estancia en Londres, preparando el desembarco.
Y éste es el enlace del documental (del que, lamentablemente, al final se cortan bruscamente parte de sus títulos de crédito):

Recuerdos de una mañana



Conexiones. El lunes estaba en una librería comprando regalos para reyes y, de paso, haciendo mi carta. Ojeo "Llibre d'absències", de Antoni Marí, a quien admiro desde que le oí la magnífica introducción que hizo sobre Barcelona en un seminario dedicado a "Modernitat i ciutats". Veo que habla en él de mucho filósofo al que no he leído, y no lo anoto en la lista.
Anoche, buscando en casa al ir a dormir un libro para leer y así descargar un poco la estantería de pendientes, doy con "Libro de ausencias", la versión castellana del libro, escrita también por Marín. Lo había comprado o pedido, y aún no lo había iniciado. Empiezo a leerlo.
En su primera página, segundo párrafo, hablando de "La idea" del libro, leo: "En los últimos meses el recuerdo de un amigo fallecido - se había arrojado a la calle desde el balcón de un quinto piso en Barcelona- (...)". Cojo el lápiz, señalo la frase, y en su margen anoto "¿Recuerdos de una mañana?"
por la coincidencia con la aún casi última película de José Luis Guerin. Más abajo, un "paciente aprendizaje del violín" como actividad previa del suicida me confirma mi sospecha y hago desde el párrafo, que subrayo, una flechita hacia la anotación anterior.

Paso página: "Poco después había visto en Segovia, en el museo de Esteban Vicente, la exposición de José Luis Guerín sobre el descubrimiento de la pintura como una revelación de la ausencia (...). Sigo señalando con lápiz.