Hice trampa y, diciendo que fastidia leer siempre las mismas cosas en los comentarios sobre “Cuentos de Tokio” o cualquier otra película de los años 50 y 60 de Ozu, volví a soltar unas cuantas de ellas.
Y eso era lo necesario para este “Casi lloré de emoción al ver esa escena en el cine” que me publica hoy La Charca Literaria:
No hay comentarios:
Publicar un comentario