High School

El que recibe a todos los que han entrado en algún conflicto

…y tiene como misión amonestarlos para la vuelta al orden.

El Canal TCM inicia un ciclo de Frederick Wiseman, y la suerte que tengo es que lo hace con dos de sus primeras películas que, además, no había visto.

La primera es “High School” (1968), en la que Wiseman hace aquello a lo que luego, durante muchos años, nos llegó a acostumbrar: filmar todo tipo de acontecimientos de una institución para ofrecernos, mediante un paciente montaje, las escenas que cree nos pueden resultar más representativas.

Siendo de sus primeras películas, algo tiene de diferente al modelo que se impondrá después en su cine: sus primeras imágenes nos presentan un acercamiento en coche hasta la North East High School de Pensilvania, donde vamos a estar el resto del metraje. Pero ese acercamiento se hace con una potente y famosa canción de Ottis Redding de banda sonora. Más tarde, una profesora hace fijarse a los alumnos en una poesía de Paul Simon, para acabar poniendo la correspondiente canción de Simon y Garfunkel… que Wiseman aprovecha para servir de enlace sonoro estético con el plano siguiente, en el que vemos a una limpiadora en uno de esos enormes pasillos de las high School norteamericanas con los que nos ha familiarizado el cine.

Las escenas escogidas por Wiseman inciden, me parece a mí, en dos aspectos: la moral y la disciplina a la que, con buenas palabras, se intenta someter a los alumnos que han mostrado un cierto aire emancipador. Pero hay otra cuestión que determina dramáticamente la visión de la cinta. Estamos en 1968, en lo más cruento de la guerra del Vietnam. Nos damos cuenta que esos pipiolos pueden ir dentro de poco a perder la vida allí, “defendiendo nuestros valores”.

Un marine habla con un preparador físico sobre un antiguo alumno que fue a Vietnam y arruinó su carrera como futbolista por haber sido alcanzado por un proyectil en el pie. Pero además Wiseman concluye el film con la lectura, por parte de una emocionada profesora, de una carta recibida en los momentos previos a una misión bélica escrita por un también antiguo alumno se ve que mediocre, que te hacen dudar vuelva vivo a casa. La profesora se siente orgullosa de la educación impartida en la High School a ese desgraciado chaval.

Reunión con los padres de la alumna.

El marine visitando el instituto.